Pediatrics Pulmonology
Comentario
Fecha de publicación: 17 de abril de 2020
Resumido por: Yirlany Padilla Ureña. Interna Universitaria de la Universidad de Costa Rica.
Revisado por: Manuel E. Soto-Martínez, MD MSc.
En marzo de 2020, el Comité Internacional de la Asamblea da la Sociedad Americana Torácica de Pediatría realizó un podcast en el que neumólogos de todo el mundo compartían su experiencia con la COVID-19 en niños. Los temas comúnes se centraron en 3 ideas principales:
a) Clínica y progresión benigna de los casos pediátricos en comparación con los adultos.
b) Necesidad de estrategias para proteger al personal de salud.
c) Desigualdades económicas como barrera para un control exitosos de la pandemia.
Curso benigno de los casos pediátricos
Los casos pediátricos de COVID-19 constituyen un pequeño porcentaje del total de hospitalizaciones por esta causa y además su mortalidad es baja. La neumonía es el diagnóstico más común en aquellos pacientes pediátricos COVID-19 sintomáticos.
La fiebre no es un signo prominente, mientras que opacidades en vidrio esmerilado observados en las radiografías es un hallazgos bastante común y el espectro de síntomas es más amplio: diarrea, vómitos y fatiga.
Los niños juegan un papel importante en la transmisión del virus a nivel de la comunidad debido a un curso de la enfermedad generalmente asintomático, por lo que el aislamiento y las pruebas extensivas en esta población son vitales para el control de la enfermedad.
Los niños con presentaciones clínicas severas generalmente tienen otras comorbilidades como malignidad oncológica, diabetes e inmunodeficiencias. La enfermedad crónica respiratoria no se ha documentado como factor de riesgo para COVID-19 grave en niños.
Medidas de distanciamiento social y servicios médicos
La telemedicina está siendo implementada a nivel mundial como parte del seguimiento de pacientes con condiciones crónicas.
La habilitación de servicios de salud de emergencias es vital para la protección de la salud de todo niño con enfermedad no COVID-19
Una tema a destacar es la nebulización. Esta debe ser evitada y reemplazada por tratamiento inhalado con espaciador e inhaladores de dosis.
El distanciamiento social parece ser la mayor herramienta para prevenir la transmisión del virus en niños, sin embargo, en muchos países, el principal obstáculo para esta medida son las desigualdades sociales.
Seguridad del personal de salud
Algunas medidas implementadas en hospitales son: toma diaria de temperatura a toda persona que ingrese al hospital, pruebas por COVID-19 a todo niño que se deba hospitalizar así no sea sospechoso de la enfermedad y circuitos de televisión cerrados para disminuir el contacto con pacientes COVID-19
La adecuada higiene de manos y el uso de equipo de protección personal (respirador, guantes, protección ocular, batas, gorro) son esenciales. La disponibilidad de mascarillas N95 y quirúrgicas debe ser una garantía para los trabajadores de la salud.
La ansiedad, el estrés y el cansancio entre el personal de salud son factores de verdadera preocupación durante esta pandemia.
Un plan de acción flexible es un componente importante del manejo. La flexibilidad para mover personal de salud a áreas requeridas de atención por COVID-19 es un requisito durante la pandemia.
Conforme la pandemia se concentra en regiones con menores recursos económicos (África, América Latina) nacen preocupaciones sobre el acceso al equipo de protección personal, la incapacidad para practicar el distanciamiento social y el lavado de manos frecuente en comunidades pobres, así como el potencial impacto en cuanto a la severidad de enfermedades altamente prevalentes, como tuberculosis y VIH.
Referencia bibliográfica: Yilmaz O, Gochicoa‐Rangel L, Blau H, Epaud R, Lands L, Lombardi E et al. Brief report: International perspectives on the pediatric COVID‐19 experience. Pediatric Pulmonology. 2020;55(7):1598-1600. 10.1002/ppul.24800.
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