Archives of Disease in Childhood
Artículo de opinión
Fecha de publicación: 18 de mayo del 2020
Resumido por: Natalia Rivera Sandoval
Revisado por: Manuel E. Soto-Martínez, MD MSc.
Discusión
La población en países con bajos ingresos, incluidos los niños, puede verse afectada por la pandemia tanto indirecta como directamente. Las razones clave incluyen:
Altos niveles de VIH, tuberculosis y desnutrición.
Mal manejo de enfermedades no transmisibles.
Hacinamiento en las viviendas y congregación social.
Saneamiento inadecuado e inestabilidad de ingresos.
Debilidades del sistema de salud que abarcan elementos fundamentales como el agua, el saneamiento y la higiene.
Déficits de la fuerza laboral y las salas de hospital sin aislamiento.
Falta de medicamentos básicos.
Poca capacidad de aumentar disponibilidad de ventiladores o capacidad de Unidades de Cuidados Intensivos.
Falta de equipo de protección personal (EPP).
Poca capacidad de pruebas diagnósticas para COVID-19.
Por lo tanto, además de fuertes medidas de contención, se sugiere que los países con bajos ingresos aborden la pandemia por COVID-19 mediante tres intervenciones en el sistema de salud: brindar adecuada oxigenación, garantizar la protección de personal de salud y mantener los servicios de rutina.
Adecuada oxigenación
En muchos países, los suministros de oxígeno para niños y adultos son limitados. Se ha demostrado que el suministro de oxígeno, sin CPAP o ventilación mecánica, reduce la mortalidad en niños con neumonía en un 35%. Los países deben evaluar urgentemente su capacidad para proporcionar oxigenoterapia a niños y adultos, identificar brechas y obtener fuentes de oxígeno adicionales y equipos necesarios para tratar a todas las personas que necesitan oxigenoterapia debido a COVID-19 y otras causas.
Protección del personal de salud
En cuanto a la protección del personal en salud, la mayoría de los hospitales en entornos de bajos ingresos están mal preparados y con pocos recursos. Se pueden poner en práctica muchas medidas simples disponibles en guías de control de infecciones. Sin embargo, se requerirán grandes esfuerzos para ampliar el suministro de jabón y desinfectante de manos, y fortalecer las cadenas de suministro de EPP.
Continuar con los servicios de rutina
Los niños con afecciones crónicas aún necesitan sus medicamentos y el control de sus patologías, las infecciones agudas deben tratarse, los recién nacidos de alto riesgo necesitan atención especial y los programas de inmunización deben continuar en funcionamiento para no perder terreno en el control de muchas enfermedades. Por lo tanto, la contención y el mantenimiento de servicios básicos de salud y sociales para niños y familias deben ser prioridades.
Conclusiones
Esta crisis ha demostrado que los sistemas de salud en todo el mundo no cuentan con recursos suficientes, en particular el bajo número de enfermeras y médicos, un problema que socava todos los demás avances técnicos o nuevas intervenciones. A la larga, se requieren esfuerzos serios y sostenidos para capacitar a más trabajadores de la salud, apoyarlos y valorar el compromiso y su contribución a la comunidad. COVID-19 está ayudando al mundo a comprender esto, esperemos que perdure mucho después de que todo esto haya terminado.
Referencia: Duke, T., English, M., Carai, S., Qazi, S. Paediatric care in the time of COVID-19 in countries with under-resourced healthcare systems. Archives of Disease in Childhood 2020. DOI: 10.1136/archdischild-2020-319333
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